El Mundial de Clubes ya tiene su primera expulsión relámpago

Nicolas Jackson protagonizó una de las escenas más insólitas en la historia reciente del Mundial de Clubes. El delantero del Chelsea recibió tarjeta roja directa a los cuatro minutos de haber ingresado al campo en el segundo tiempo del partido frente a Flamengo, justo el día de su cumpleaños número 24.

El atacante senegalés saltó desde el banco en el minuto 64 para intentar revertir el rumbo del partido cuando su equipo el Chelsea estaba contra las cuerdas contra el Flamengo, pero su entusiasmo terminó en tragedia deportiva. Apenas pisó la cancha, cometió una dura entrada sobre Ayrton Lucas en la mitad del terreno, pisándole el tobillo con una plancha que no dejó dudas. El árbitro salvadoreño Iván Barton no titubeó: expulsión inmediata.

El Chelsea, que ganaba 1-0, ya había comenzado a ceder terreno ante el empuje brasileño. Con la tarjeta roja, el equipo londinense terminó descompuesto y fue superado por un Flamengo que terminó imponiéndose 3-1. Más allá del marcador, lo que quedó en la retina fue la fulminante actuación de Jackson, quien ya había sido expulsado semanas antes en un duelo por la Premier League.

Tras el partido, el propio jugador ofreció disculpas públicas, aceptando su error y asegurando que no hubo intención maliciosa. Sin embargo, el episodio reaviva las críticas sobre su temperamento y su capacidad para responder en momentos clave. Jackson se convirtió, de paso, en el primer jugador en ser expulsado en un tiempo tan breve en la historia del certamen.