Familia boliviana se topó con Conor McGregor cuando paseaba por Marbella

Estaban paseando por el puerto deportivo de Almerimar, en el municipio de El Ejido, España, cuando vieron un lujoso yate y una multitud expectante. Del yate bajó un peleador de Artes Marciales Mixtas (MMA), que se paseó junto a ellos, ‘hizo guantes’ con un sparring para mostrar sus habilidades y deleitar al público. Esto le sucedió a Hernán Rodríguez, un cruceño que vive desde hace décadas en Marbella con su familia.

“En el octágono parece una persona arrogante, pero en persona se muestra diferente”, comentó Rodríguez, quien estaba entre el público cuando Conor bajó de su yate con guantes puestos, saludó cordialmente a la gente y los invitó a ver una exhibición de boxeo que realizó con uno de sus asistentes.

“Lleva aquí 20 días y todos los días hace esas exhibiciones”, añadió Rodríguez. El irlandés ofrece a los espectadores la oportunidad de verlo en acción como una de las máximas figuras de su deporte, aunque no ha subido al octágono en tres años.

“Mi hijo trabaja en la zona y lo ve prácticamente todos los días”, agregó. Según los reportes, el yate Tecnomar Lamborghini 63, de 19 metros de largo y 24 toneladas, es un modelo deportivo de lujo valorado en casi 3 millones de euros.

Conor McGregor. El irlandés es copropietario de BKFC, empresa que el pasado 12 de octubre celebró a lo grande uno de sus eventos en Marbella.

Al momento de solicitarle la familia su autógrafo, el pugilato respondió:

"No puedo firmar ahora porque tengo guantes, necesito ir a entrenar y después firmo"

El Bare Knuckle nace con la premisa de volver a los orígenes y traer de vuelta el boxeo primigenio, el que se hacía sin ningún tipo de protección. A puño limpio. Impacta verlo en directo. Al público más casual, pero también al que más acostumbrado está a seguir los deportes de combate. Incluso a aquellos que los practican.