El egipcio marcó el 4-2 definitivo en el tiempo añadido y celebró como su excompañero Diogo Jota, fallecido en julio.
15/08/2025 21:06
Escuchar esta nota
Mohamed Salah no solo fue el héroe del Liverpool en el marcador, también lo fue en el corazón de Anfield. En el debut de los Reds en la Premier League 2025-26, el egipcio selló la victoria por 4-2 ante Bournemouth en el tiempo añadido y dejó una imagen para la historia: su llanto, su homenaje y su conexión eterna con Diogo Jota.
En una noche marcada por la emoción, el recuerdo del portugués —fallecido en julio en un trágico accidente automovilístico— fue protagonista invisible de cada jugada. Pero fue en el minuto 90+4’ cuando todo se detuvo: Salah anotó el cuarto gol y, sin pensarlo, corrió a celebrar como solía hacerlo Jota. El gesto fue suficiente para que miles en Anfield comprendieran la intención.
Luego, el “11” se quebró. Entre lágrimas, con la mirada al cielo y el corazón en la mano, Salah se fundió en una celebración conmovedora que trascendió lo deportivo. Fue el tributo de un compañero, de un amigo, de una leyenda viva del club al recuerdo de otro que partió demasiado pronto.
La ovación fue inmediata, ensordecedora. Desde las tribunas, los cánticos por Salah se mezclaban con los de Jota, mientras Arne Slot, en su estreno como DT red, aplaudía conmovido desde la banda.
“Ese gol fue para él. Nunca lo vamos a olvidar”, diría Salah en zona mixta, visiblemente afectado pero firme.
Mira la programación en Red Uno Play
20:40
23:30
00:00
01:00
03:00
04:00
20:40
23:30
00:00
01:00
03:00
04:00