Marset reveló que quiere entregarse en Uruguay, pero que dejen fuera del caso a su familia

Durante la entrevista publicada ayer en la televisión uruguaya, el narcotraficante Sebastián Marset reveló que tiene la intención de entregarse a la justicia de su país, pero con condiciones.

Sin embargo, la Fiscalía uruguaya no le sigue un proceso a Marset, ya que solo está investigando a las autoridades de Gobierno que le entregaron un pasaporte, presuntamente de forma irregular, para que pueda ser liberado de su arresto en Dubái.

Así, en el hipotético caso de que Marset decida entregarse a las autoridades en Uruguay, tendría que ser derivado a Interpol para su traslado a Paraguay, país que sí emitió una notificación roja en su contra por supuesto tráfico de drogas. A la vez, tiene cinco procesos penales en Bolivia, pero el país aún no ha solicitado una orden de captura internacional.

“A veces no entiendo por qué Uruguay intenta buscarme o molestarme si dicen que no tengo ningún caso en Uruguay que me comprometa. Dicen que, si me capturan en Uruguay, me extraditarían a Paraguay, donde tengo un caso que responder, no entiendo esa parte”, expresó Marset.

Por esta razón, el narcotraficante no se entregaría a su país. De hecho, su abogado había manifestado ante la Fiscalía su intención de entregarse, siempre y cuando se proteja a su familia y que él no sea trasladado a Paraguay o Bolivia.

Ayer, Marset afirmó que no confía en las justicias de Bolivia y Paraguay porque son "países corruptos" y correría peligro tanto su integridad física como la de su familia.

“Bolivia es más corrupta que Paraguay. Si confiara, diría que para solucionar el problema de mi hermano y mi cuñado, se presentarán, pero no confió nada en ellos. Uruguay, en mi punto de vista, es el menos corrupto a nivel de Sudamérica de los países que yo conozco”, dijo el prófugo de la justicia boliviana.

En febrero de 2022, la operación "A Ultranza Py", considerada como el mayor operativo contra el crimen organizado y lavado de dinero en ese país, logró desarticular la banda de Marset. En mayo de ese año, el fiscal Marcelo Pecci, parte de la operación, fue asesinado durante su luna de miel en Colombia, lo que demostró el peligroso alcance de la red criminal liderada por Marset, publica El Deber.

Entonces, se emitió la alerta roja contra Marset, pero ayer, él aseguró que no participó en el asesinato. Es más, dijo que ni siquiera conocía al fiscal.

"Por suerte están saliendo las cosas a la luz y yo no tengo ni un 0.1% que ver en eso. No conocía a Marcelo Pecci. Lo conocí cuando lo vi en la tele", le respondió a la periodista uruguaya.

Además, aclaró que su familia no está implicada en los “negocios” que él realiza. Lamentó que su esposa Gianina García Troche esté siendo investigada y tenga notificación roja solamente por crear una empresa que nunca funcionó. Aclaró que con esta organización no lavaron dinero, como las autoridades de Paraguay lo denuncian.

“La empresa de mi señora, ella la creó cuando nos fuimos de Uruguay, pero nunca la usamos. No sé de dónde sacan que ella tiene miles de dólares. No existe el lavado de dinero. Y de mi hermano dicen que yo le di un auto como parte de pago, cuando mi hermano nunca hizo nada para mí porque yo no mezclo las cosas. Ese auto es usado y vale 16.000 dólares, yo se lo regalé a mi hermano por su cumpleaños”, detalló.