Policías permanecerán en el Trópico, no serán replegados

Los 85 policías permanecen resguardados en el cuartel de la Unidad Móvil de Patrullaje Rural (Umopar) de Chimoré, después de los hechos registrados el pasado jueves en Shinaota, cuando una turba los expulsó del lugar.

El comandante Departamental de Policía de Cochabamba, Franz Sellis, dijo que los oficiales agredidos no presentaron daños físicos y que todos se encuentran en buenas condiciones, al momento no se han presentado más incidentes.

El pasado 8 de diciembre, la dirigente de la Federación del Trópico, Segundina Orellana, declaró que “si quieren volver, primero deben pedir perdón de rodillas”. En una reunión el dirigente cocalero Leonardo Loza dijo “ellos se fueron porque quisieron, nadie los botó, pueden volver cuando quieran”.

El 10 de marzo de 2020, el Tribunal Departamental Electoral (TED) se reunió con alcaldes de cinco municipios, dirigentes, la Policía y las FF.AA para consensuar el retorno de la institución del orden a esa región. Se dio un plazo de 15 días para cumplir el objetivo.

De dicha reunión participaron autoridades municipales de Chimoré, Shinahota, Puerto Villarroel y Entre Ríos. El 13 de marzo, para “limar las asperezas”, el presidente de la Asociación de Municipios de Cochabamba (Amdeco), Héctor Arce,convocó a una reunión a los jefes policiales, alcaldes, dirigentes del trópico y de otras regiones.

Pese al compromiso asumido ante el TED, se pusieron “condiciones”, para que la Policía ingrese con garantías a la zona en conflicto. Las condiciones iban desde iniciar procesos y encarcelar a los policías que quemaron la whiphala el día del “motín” y que la Policía trabaje de manera coordinada con los dirigentes del trópico.

El jueves 16 de abril se registró la expulsión y agresión a los uniformados que ingresaron al Trópico.