Ser un gamer requiere técnica y preparación, aunque no lo creas

Es probable que algunos durante su infancia se vieron envueltos por la afición a los juegos de consola o computadora, pero con el tiempo seguramente se habrán percatado de que tenían habilidades mayores.

Así como a una persona que se entretiene con una buena película no se puede llamar cinéfilo, tampoco se puede decir que alguien es un gamer por disfrutar esporádicamente de un videojuego.

Muchos de ellos generalmente están asociados a los juegos más artísticos como es el caso de Limbo y Viaje. También a algunos reflexivos como Braid Portal, o de gran presupuesto como es el caso de Mass Effect, Bioshock Infinite o Skyrim.

Los gamers saben reconocer las historias que hay detrás de cada videojuego, así como los gráficos, diseños, sonido y partituras musicales. De esta forma, se fijan en cada uno de los detalles relacionados a ese juego. Y actualmente son reconocidos como atletas en muchos países.

Diversos aspectos pueden estar enmarcados en la definición de un gamer. Muchos de ellos lo llevan al punto de vista profesional, ya que su oficio es ganar dinero de forma recurrente jugando videojuegos.

Estos profesionales suelen asistir a ferias y distintos eventos donde compiten con otros jugadores. Así como en cualquier deporte, los gamers también tienen fanáticos que los aúpan y ellos suelen retribuir estas muestras de cariño grabando videos con consejos para que los seguidores puedan aplicarlos a distintos juegos.

Ellos forman parte de equipos profesionales como SK Gaming, SK Telecom T1, G2 Esports, Psistorm, Root, Team Liquid y Lyon Gaming. Allí demuestran que pueden jugar por placer, pero lo hacen de forma profesional.

Actualmente juegan en consolas, computadoras o incluso en celulares. Los rangos de edad pueden ir desde los 11 hasta los 44 años de edad y aunque la mayoría de estos jugadores son hombres, también hay un elevado número de mujeres dedicadas a esta profesión.

Generalmente no prefieren los videojuegos casuales, sino que se enfocan en algunos más complicados, que sean difíciles de manejar e impliquen un reto. Todo sin dejar a un lado la diversión.

Estas personas pueden pasar horas disfrutando, conociendo y explorando lo que hay detrás de un juego. Se interesan por conocer los aspectos ocultos como la gráfica, informática y las tecnologías presentes en su desarrollo.

No importa si eres un aficionado o un jugador profesional. Los videojuegos cada día va ganando más seguidores en todo el mundo al mezclar la diversión con el mundo profesional.