Gobierno denuncia a Evo Morales ante la comunidad internacional por incitar violencia y sabotear proceso electoral

El Gobierno a través del Viceministerio de Relaciones Exteriores, presentó este jueves una denuncia formal ante instancias internacionales contra el expresidente Evo Morales, a quien responsabiliza directamente por los hechos violentos ocurridos en las últimas semanas, que han dejado muertos, heridos y caos en varias regiones del país.

En conferencia de prensa, el viceministro Esteban Catarina Mamani informó que la denuncia fue remitida a organismos como la ONU, la OEA y entidades de derechos humanos, así como a gobiernos de América Latina, Europa y Asia, con el fin de exponer el accionar violento y antidemocrático que estaría promoviendo Morales y su entorno.

“Estamos dando a conocer todos los hechos de manera imparcial. Ningún otro partido político o movimiento social en Bolivia se opone hoy a las elecciones generales. Solo hay una persona, un líder político con sus acompañantes, que ha recurrido al bloqueo violento para forzar su habilitación inconstitucional como candidato”, denunció Catarina.

El viceministro condenó la muerte de efectivos policiales, especialmente la brutalidad con la que fue asesinado el teniente Christian Calle Alcón, víctima de una emboscada con dinamita colocada en su cuerpo.

“Eso no es enfrentamiento, eso es asesinato artero y planificado, es terrorismo. Esas acciones no son expresión democrática, son el resultado de la ambición de poder de Evo Morales”, enfatizó.

Catarina recordó que la Corte Interamericana de Derechos Humanos y el Tribunal Constitucional Plurinacional ya determinaron que la reelección indefinida no constituye un derecho humano, por lo tanto, cualquier intento de reinstalar esa narrativa representa una violación a la legalidad y al orden constitucional.

“No hay ningún otro actor político que esté buscando salidas fuera de la democracia. Solo Morales y sus operadores están promoviendo violencia para torcer la voluntad popular”, indicó la autoridad.

El Gobierno aseguró que el proceso electoral previsto para agosto continúa su curso, con más de 200 observadores internacionales confirmados y bajo el compromiso de garantizar una elección transparente y pacífica.

Finalmente, el viceministro instó a la comunidad internacional a pronunciarse frente a estos hechos, advirtiendo que lo que está en juego no es una candidatura, sino la estabilidad democrática de todo un país.