Huarachi pide nacionalizar los surtidores privados y Asosur rechaza la propuesta

Tras conocerse la propuesta de la Central Obrera Boliviana (COB) de nacionalizar las estaciones de servicio privadas; la Asociación de Surtidores (Asosur) rechazó la propuesta.

La semana pasada, la Central Obrera Boliviana (COB) realizó un ampliado en la ciudad de Tupiza, Potosí. El secretario ejecutivo de la COB, Juan Carlos Huarachi, dio a conocer las resoluciones adoptadas por el ente matriz de los trabajadores del país, que incluyen controlar las divisas, nacionalizar todos los surtidores privados y aplicar un impuesto a la exportación de oro.

Así, reiteraron su pedido al Gobierno de controlar las divisas provenientes de las exportaciones del sector privado, a pesar de que ya fue descartado por el Gobierno, cuando lo plantearon como una de las resoluciones del gabinete social. Además, presentaron otras demandas que incluyen la nacionalización de todos los surtidores privados e instaurar un impuesto a la exportación del oro en el país.

La COB propuso implementar medidas de control de divisas, como "una estrategia dirigida a proteger la economía nacional y garantizar que los recursos financieros del país se utilicen de manera efectiva". "Es fundamental que controlemos las divisas para garantizar que nuestros recursos financieros sean utilizados en beneficio del pueblo", afirmó Huarachi.

Nacionalizar todos los surtidores de distribución de diésel y gasolina, según la COB, tiene el objetivo de garantizar el control estatal sobre este recurso. Huarachi dijo que se presentó esta propuesta debido a la escasez de dólares y diésel que atraviesa el país y que ha provocado el encarecimiento de los productos básicos.

Asosur rechaza la propuesta

La Asociación de Surtidores (Asosur) expresó su rechazo enfático a la propuesta de la COB y consideró ese planteamiento como irresponsable y que ahuyenta inversiones. 

La Asosur, a través de un comunicado, advirtió que “esta demanda lo único que hace es amenazar la seguridad jurídica y la libre iniciativa privada, esenciales para un Estado de derecho”. 

“Estas declaraciones irresponsables lejos de solucionar la situación económica de nuestro país, no solo ponen en peligro la inversión de empresarios bolivianos dedicados a la comercialización minorista de combustible, sino también, afecta directamente al índice de riesgo de inversión en Bolivia, ahuyentando futuras y potenciales inversiones”, se lee en su comunicado.

Para dar una solución a esta situación, Asosur reitera que la solución en el sector energético pasa por un diálogo sincero, constructivo y políticas que promuevan la cooperación entre el sector público y privado.

Aclararon que los surtidores privados solo comercializan el combustible que otorga un único proveedor mayorista.