"Le gustaba el deporte": Danny sufrió un accidente que lo dejó postrado en una cama hace cuatro meses

En el sector Primero La Gente, conocemos la historia de Danny Masiri, un joven de 29 años que sufrió un accidente en la zona de la Villa Primero de Mayo. Ahora necesita una tercera cirugía para una prótesis, que tiene el costo de Bs. 28 mil. Su madre pide ayuda a la población para que pueda volver a caminar. 

Su destino cambió el 21 de julio cuando una camioneta invadió carril y chocó de frente con su motocicleta, dejándolo con múltiples fracturas en la cadera, pie izquierdo y rodilla. No puede trabajar, ni llevar el sustento a su hogar, donde están su esposa e hija de 10 años, como antes lo hacía.

Reyna Aguilera, la madre de Danny, contó, con lágrimas y un nudo en la garganta, que le duele ver a su hijo en esa situación. La moto en la que sufrió el accidente era su medio de transporte a su fuente laboral.

"Era domingo, salieron a hacer compras al mercado, como todos los domingos. Yo vine de paseo a Santa Cruz, vengo de la Chiquitania, de San Javier. Entonces, salieron a hacer compras, desayunar y no volvieron a casa. Me enteré a las 3 de la tarde que él estaba en una clínica, su esposa estaba con él, también se accidentó, pero ella está mejor. Como pudimos lo hicimos trasladar al hospital San Juan de Dios, por los gastos", contó la madre.

Danny trabajaba de albañil, cumpliendo una jornada de más de 12 horas, desde la cinco de la mañana.

"(Los dueños de la camioneta) estaban ayudando con los gastos, pero ellos también son de bajos recursos. Ahora necesita una cirugía para la prótesis para la cadera, que cuesta 28.000 bolivianos. Eso lo necesita sí o sí, urgente, lo más antes posible. Él no puede caminar, no puede moverse ni para ir al baño, está en la cama. Todo el tiempo está con calmantes", agregó.

Reyna tuvo que dejar su hogar en la Chiquitania para quedarse en Santa Cruz a cuidar a su hijo, ya no que puede moverse por sí solo.

"El traumatólogo dijo que si no se hace esta cirugía no podrá volver a caminar. Su cadera está bien fracturada, no puede caminar y si no se hace esta cirugía, no va a volver a caminar", reiteró la madre.

Contó que a su hijo le gustaba estar en movimiento y además de trabajar, hacia deporte.

"Era deportista mi hijo, le agradaba jugar. Le gustaba el deporte, era trabajador. Me duele muchísimo verlo postrado en la cama. Quiero volverlo a ver como era. Me ayudaba cuando trabajaba", complementó.