“Ser maestro es lo mejor que me ha pasado”: Con vocación, lucha y esperanza celebran su día

En el marco de la celebración del Día del Maestro, el secretario ejecutivo de la Federación de Maestros Urbanos de Santa Cruz, Osmar Cabrera, envió un emotivo mensaje de felicitación a sus colegas, resaltando el compromiso, la vocación y la lucha diaria por una educación de calidad en Bolivia.

“De parte también de toda la Federación de Maestros Urbanos de Santa Cruz, queremos mandar un mensaje de felicitación a todos nuestros colegas en este día del maestro”, expresó Cabrera durante una entrevista con El Mañanero. Pero la conmemoración, más allá del festejo, llega cargada de reclamos justos y sentimientos encontrados.

Celebrar, sí… pero también exigir

La fecha, explicó, no solo se trata de flores y reconocimientos, sino de poner sobre la mesa las urgencias del sector: precariedad en los recursos, sueldos bajos y escasa atención institucional. “Es momento de escuchar en este 6 de junio también la demanda del sector”, agregó.

La docencia como un acto de entrega

Para Cabrera, ser maestro no es simplemente una profesión. Es un acto de entrega total. “Más allá de las condiciones que tenemos, ser maestro es dar esa luz de esperanza, ese horizonte a nuestros estudiantes. Significa entregarnos y comprometernos con su futuro”.

Recordó entre risas una anécdota que ilustra esta entrega: “Una vez, al entrar al aula, se me rompió el pantalón casi a la mitad. Y ahí, entre la risa de los estudiantes, improvisamos una costura para seguir con la clase. A pesar de todo, ahí estábamos firmes”.

Educar: más que enseñar una materia

Cabrera reflexionó sobre el rol integral del maestro. “No solo enseñamos contenido. Enseñamos a pensar, a vivir, a sentir. Formamos en valores y generamos conciencia. Ser maestro es entregar la vida, la emoción, el sentimiento”.

Además, compartió cómo su propia formación estuvo marcada por profesores rigurosos pero influyentes. “Tuve maestros que aún recuerdo con cariño, como aquel que con su varita decía ‘saca lo malo, mete lo bueno’. No es apología a la violencia, pero esas experiencias forjan carácter y responsabilidad”.

Desafíos del presente y futuro

Finalmente, Cabrera abordó los retos actuales del magisterio, especialmente tras la pandemia. “Nos enseñó a renovarnos. Hoy la tecnología es una herramienta vital, aunque en la educación pública seguimos con muchas falencias”.

Y concluyó con una frase que resume el espíritu docente: “El que haya decidido enseñar, nunca debe dejar de aprender”.