“Yo no vi a mi hijo cuando aprendió a caminar por estar trabajando”: La historia de Mirian Valencia

Este sábado 27 de mayo, en conmemoración al Día de la Madre en Bolivia que honra el valor y la determinación de las mujeres cochabambinas en la histórica Batalla de la Coronilla durante la Guerra de la Independencia, queremos compartir la conmovedora historia de superación de Mirian Valencia, una madre ejemplar que ha enfrentado innumerables desafíos para sacar adelante a sus dos hijos.

Hace ocho años, Mirian se vio en la necesidad de convertirse en maestra albañil para poder llevar el sustento diario a su hogar. Su jornada comienza temprano en la mañana, trabajando incansablemente en la construcción de muros, revocando, colocando pisos y pintando, habilidades que ha adquirido con dedicación y esfuerzo.

La voz de Mirian se quiebra al recordar los sacrificios que ha tenido que hacer en su papel de madre: “Uno se pierde muchas cosas por los niños, cuesta todos los días, yo no vi a mi hijo cuando aprendió a caminar por estar trabajando”. A pesar de las dificultades, su amor y determinación la impulsan a seguir adelante.

La historia de Mirian Valencia es un testimonio de fuerza y perseverancia. Cada día, deja a sus hijos solos mientras se dirige al trabajo, llegando tarde y apenas teniendo unas pocas horas para estar con ellos. Sin embargo, sabe que este sacrificio es necesario para asegurarles un futuro mejor y poder brindarles al menos un plato de comida.

En este Día de la Madre, recordemos a todas las madres valientes como Mirian, quienes, con su amor incondicional y sacrificio diario, demuestran que no hay barreras que no puedan superar en busca del bienestar de sus hijos. Son ejemplos vivos de fortaleza y una inspiración para todos.

¿Por qué en Bolivia se celebra el Día de la Madre el 27 de mayo?

Contrariamente a otros países, donde festejan a las madres el día de la virgen María, en Bolivia el Día de la Madre es el 27 de mayo por razones históricas poco comunes.

Como no había hombres en la ciudad (porque estaban en otras batallas en el país) y a fin de proteger a sus hijos, las mujeres de la ciudad decidieron organizarse y armarse para hacer frente a los españoles. Escalaron la colina de San Sebastián (la Coronilla) con la consigna: “nuestro hogar es sagrado” y exhibiendo la imagen de la virgen de la Merced. Ellas pretendían bloquear el ingreso de las tropas españolas, pero fueron masacradas y tres días después la ciudad estaba ocupada por los españoles.  

Por más de un siglo, en Cochabamba esta fecha pasó de la “Fiesta de Dios” a ser “Fiesta Triste de Dios”.

El 8 de noviembre 1927 el presidente de la República Hernando Siles Reyes consagró oficialmente el 27 de mayo como Día de la Madre en Bolivia, en reconocimiento a la valentía de las mujeres de la Coronilla. El artículo de ley precisa también que en esta fecha todos los colegios y establecimientos educativos tienen que rendir homenaje a las madres.

Desde entonces, el 27 de mayo cobra mucha importancia (es mucho más importante que el día del padre), se preparan actividades con un mes de anticipación.  Los anuncios publicitarios invaden los medios, puesto que no puede faltar el “regalo para mamá”.

La madre juega un rol muy importante en la cultura boliviana, es el pilar fundamental del hogar, ya que la mayoría de las familias bolivianas, lamentablemente, se caracterizan por la ausencia del padre. En la mayoría de los casos, la manutención y la crianza de los hijos están a cargo de las mujeres.