Defensa de Claudia Castro denuncia amenazas y cuestiona su traslado a Obrajes pese a su delicado estado de salud

La exvocal del Tribunal Departamental de Justicia (TDJ) de La Paz, Claudia Castro, investigada por el denominado 'caso consorcio', fue trasladada este viernes desde la clínica donde permanecía internada al Centro de Orientación Femenina de Obrajes, en cumplimiento de una orden de detención preventiva.

Su defensa denunció que la exautoridad habría recibido amenazas contra su vida y que su estado de salud no es compatible con la reclusión.

“La doctora Claudia Castro recibió amenazas de que, una vez en el penal, su vida correría peligro; incluso se hablaba de que podrían matarla. Ya en celdas de la Felcc se dieron este tipo de advertencias”, declaró el abogado Marco Mostajo, parte de su equipo legal.

El jurista también expresó sorpresa ante la ejecución del mandamiento de detención en horas de la tarde, señalando que existen informes médicos, entre ellos uno psiquiátrico, que recomendaban que Castro continuara internada.

“Fue trasladada en camilla, a bordo de una ambulancia, directamente a la enfermería del penal. Su estado de salud es delicado”, añadió.

Según explicó, durante la audiencia de medidas cautelares, Castro sufrió un desvanecimiento y fue diagnosticada con un problema neurológico con impacto emocional. Mostajo sostuvo que un certificado médico recomienda que un centro de reclusión no es adecuado para asegurar su tratamiento.

La Fiscalía, por su parte, argumentó que el traslado se efectuó con base en un informe médico forense, el cual indicaba que su ritmo cardíaco, respiración y signos vitales eran estables. Sin embargo, la defensa señaló que hubo presión judicial para acelerar el alta médica desde la clínica.

“Se requerían varios estudios que no se realizaron. Claudia ingresó con diagnóstico reservado, pero se presionó para que se le diera el alta médica y proceder al traslado. Esta semana solicitaremos que se completen esos exámenes”, declaró Mostajo.

El caso fue declarado en reserva, y la defensa asegura que Castro no ha cometido ningún acto irregular. Además, afirman que se han desvirtuado todos los riesgos procesales y que ya interpusieron una apelación a la detención preventiva.