Según la neuróloga Melisa Acebey Meier, se trata de una emergencia neurológica que requiere atención inmediata.
12/06/2025 12:19
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La parálisis facial periférica, también conocida como parálisis de Bell, puede presentarse de manera repentina y muchas veces pasa desapercibida en sus primeras señales. Sin embargo, según la neuróloga Melisa Acebey Meier, se trata de una emergencia neurológica que requiere atención inmediata.
“El tratamiento debe iniciarse dentro de las primeras 72 horas. Es fundamental acudir al neurólogo a tiempo para evitar secuelas y lograr una recuperación completa”, advierte la especialista.
¿Qué es la parálisis facial?
Es una condición que ocurre cuando el nervio facial —responsable de los movimientos del rostro— sufre una interrupción. Esta puede deberse a diversos factores, pero la causa principal está relacionada con el virus del herpes tipo 1, el mismo que causa el herpes labial.
¿Cuáles son los primeros síntomas?
La doctora Acebey explica que algunos de los síntomas iniciales pueden confundirse con molestias cotidianas:
Dolor en la nuca o detrás del oído.
Lagrimeo excesivo o sensación de cuerpo extraño en el ojo.
Dolor o zumbido (acúfeno) en el oído.
Adormecimiento o contracción muscular en el rostro.
Dificultad para beber líquidos o masticar.
¿Cómo reconocerla?
Según la especialista, existen signos visibles que permiten detectar la parálisis facial:
Borramiento de las arrugas de la frente.
Caída de una ceja y del párpado.
Imposibilidad de cerrar completamente un ojo.
Desviación de la comisura labial hacia el lado opuesto al afectado.
Borramiento del surco nasogeniano (línea que va de la nariz a la boca).
¿Qué hacer?
No esperar. Esa es la principal recomendación. Si se sospecha una parálisis facial, se debe acudir de inmediato a un neurólogo, incluso si los síntomas parecen leves.
“El tratamiento temprano puede marcar la diferencia entre una recuperación completa y una secuela permanente”, afirma la neuróloga. Los pacientes que reciben atención dentro de las primeras 72 horas tienen un pronóstico significativamente mejor.
En resumen:
La parálisis facial es una emergencia médica.
Su causa principal es el virus del herpes tipo 1.
El tratamiento debe iniciarse en menos de 72 horas.
El estrés y las defensas bajas son grandes desencadenantes.
La atención neurológica oportuna puede evitar complicaciones.
Más que alarmar, esta información busca generar conciencia. Un cambio en el rostro podría ser la señal silenciosa de que algo no está bien. Y actuar a tiempo puede hacer toda la diferencia.
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