Se trata de un geólogo estadounidense que fue uno de los fundadores del campo de la ciencia planetaria.
14/02/2024 20:02
Escuchar esta nota
En los vastos confines de la luna, más allá de nuestra atmósfera terrestre, reposan los restos de un hombre cuyo nombre está grabado en la historia de la exploración espacial: Eugene Shoemaker. Este geólogo estadounidense dejó una huella imborrable en el campo de la astrogeología y la ciencia planetaria.
Shoemaker, nacido el 28 de abril de 1928 en Los Ángeles, California, fue una figura clave en el campo de la ciencia planetaria. Su legado incluye el descubrimiento del cometa Shoemaker-Levy 9 en 1993, un hito histórico en la astronomía al ser el primer cometa observado colisionando con otro cuerpo celeste, el gigante gaseoso Júpiter.
Además de su trabajo pionero en el estudio de los cometas y los impactos cósmicos, Shoemaker contribuyó significativamente al conocimiento de los cráteres de impacto en la Luna y otros cuerpos del sistema solar. Su dedicación lo llevó a colaborar en misiones como Lunar Ranger, desempeñando un papel fundamental en la comprensión de la geología lunar.
A pesar de ser considerado para participar en la misión Apolo, un trastorno de la glándula suprarrenal lo dejó fuera del equipo de astronautas. Sin embargo, su legado perdura, ya que logró alcanzar la Luna simbólicamente gracias a que parte de sus cenizas fueron transportadas a bordo de la sonda Lunar Prospector, siendo dispersadas en suelo lunar el 31 de julio de 1999.
Hoy, Eugene Shoemaker descansa en la Luna, una figura eterna en el firmamento, recordada por su valiosa contribución a la exploración del universo y su incansable búsqueda de conocimiento. Su legado perdurará mientras la humanidad continúe mirando hacia las estrellas en busca de respuestas a los misterios del cosmos.
Mira la programación en Red Uno Play
15:00
16:30
17:00
18:55
20:45
22:05
15:00
16:30
17:00
18:55
20:45
22:05