¿Ficción o presagio? El manga japonés que vaticina un tsunami en 2025 y siembra el miedo (Video)

En medio del asombro y la inquietud internacional, un manga japonés publicado hace décadas ha vuelto a sacudir al mundo. Se trata de El Futuro que Vi (The Future I Saw), una obra de la enigmática artista Ryo Tatsuki, cuyas perturbadoras predicciones han cobrado fama por su inquietante exactitud.

Primero fue la muerte de la princesa Diana, luego el devastador ataque a las Torres Gemelas en 2001, y más tarde, la aparición de una pandemia mortal que paralizó al planeta: el Covid-19. Todas estas tragedias fueron anticipadas con escalofriante precisión por Tatsuki en los sueños que luego transformó en viñetas. Hoy, el temor se reaviva por una nueva predicción que señala una catástrofe inminente: un megatsunami que azotaría Asia en julio de 2025.

Según se narra en uno de los capítulos más impactantes del manga, un fenómeno natural sin precedentes se originará por la ruptura de una falla submarina entre Japón y Filipinas. En la visión onírica de Tatsuki, plasmada en su obra, emergen dos enormes dragones bajo el océano, símbolo de la activación de placas tectónicas que darían lugar a olas de hasta 30 metros de altura. Las regiones más afectadas, según el relato, serían Japón, Filipinas, Hong Kong y Taiwán.

Lo más inquietante es que la autora desapareció misteriosamente en 2020, cinco años después de haber dibujado una última predicción: su propio funeral. Desde entonces, no se ha vuelto a saber de ella.

La atmósfera de misterio que envuelve a El Futuro que Vi ha provocado una oleada de temor, especialmente en Asia, donde el sector turístico ya reporta una drástica caída en las reservaciones. Las agencias de viaje señalan una baja sin precedentes rumbo a destinos del Pacífico asiático, justo cuando se aproxima el mes señalado por la predicción.

Aunque no existe evidencia científica que respalde los sueños de Tatsuki, la serie de aciertos pasados ha sido suficiente para sembrar el pánico en una parte del mundo acostumbrada a convivir con la furia de la naturaleza, pero no con la profecía.

¿Coincidencia? ¿Premonición? Mientras las autoridades guardan silencio y la comunidad científica desestima el contenido del manga, millones de personas observan con recelo el calendario, esperando que la ficción no vuelva a convertirse en realidad.