Según datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la obesidad y el sobrepeso aumentaron de manera alarmante, afectando al 62,5% de los adultos en el continente americano
27/12/2024 13:51
Escuchar esta nota
El cambio en nuestra forma de alimentarnos se posiciona como una estrategia esencial para prevenir la obesidad y el síndrome metabólico, dos condiciones que están alcanzando proporciones epidémicas a nivel mundial. Adoptar hábitos alimenticios más saludables puede marcar la diferencia en la calidad de vida y reducir el riesgo de enfermedades relacionadas con estas condiciones.
“No me acuerdo cuándo y por qué empecé a comer de forma desmedida. Recuerdo que cuando todavía estaba en primaria, mis compañeros ya me hacían bullying, me decían ‘la gorda’ o se hacían la burla de mí”, cuenta Alejandra, una odontóloga que tuvo que recurrir a especialistas para superar el problema de obesidad que la afectaba desde la infancia.
Según datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la obesidad y el sobrepeso aumentaron de manera alarmante, afectando al 62,5% de los adultos en el continente americano. Bolivia no es ajena a esta crisis, con un 28% de su población afectada por obesidad, según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). Esta tendencia es preocupante, especialmente en niños y adolescentes, donde los problemas de peso aumentaron cinco veces en las últimas décadas.
Danitza Vargas, coordinadora del diplomado “Obesidad y síndrome metabólico” de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, señala que los factores que propician estas condiciones están directamente relacionados con la alimentación. “El principal factor es el estilo de vida sedentario sumado a una dieta poco saludable, el consumo excesivo de alcohol y tabaco y no tener sueño de buena calidad”, sostiene.
La obesidad y el síndrome metabólico no sólo afectan la salud física, con riesgos como enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2 e hipertensión, sino también tienen un profundo impacto emocional. Alejandra, quien logró perder 55 kilos tras años de lucha contra la obesidad, comparte: “El proceso fue muy duro y doloroso”. Su experiencia resalta cómo el apoyo familiar puede ser un factor determinante en el éxito de los tratamientos.
Las causas de la obesidad son multifactoriales, incluyendo la dieta poco saludable, la falta de actividad física, el estrés crónico, la predisposición genética y el entorno obesogénico. Esta condición no sólo conlleva riesgos para la salud física, como enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2, hipertensión y ciertos tipos de cáncer, sino que también impacta negativamente en la salud mental y la calidad de vida.
Por otro lado, el síndrome metabólico es un conjunto de trastornos que incluyen la obesidad abdominal, la resistencia a la insulina, la hipertensión y dislipidemia, aumenta aún más el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares y diabetes. Este síndrome se ha convertido en una preocupación creciente debido a su prevalencia y sus graves implicaciones para la salud a largo plazo.
“Este grupo de afecciones que se presentan al mismo tiempo aumentan el riesgo de sufrir una enfermedad coronaria, un accidente cerebro vascular, diabetes y otros problemas de salud”, puntualiza la académica.
Cambiar cómo comemos es crucial para prevenir estas condiciones. Una alimentación equilibrada, rica en alimentos naturales y con un consumo moderado de azúcares y grasas, combinada con otros hábitos saludables como el ejercicio y un sueño reparador, puede ser la clave para combatir esta epidemia.
Más allá de los esfuerzos individuales, la lucha contra estas condiciones requiere un compromiso colectivo. Gobiernos, instituciones de salud, la industria alimentaria y la sociedad civil deben unirse para revertir esta tendencia y fomentar un futuro más saludable.
“Desde la infancia debemos cambiar el ‘estilo de vida moderno’. La alimentación debe ser lo más natural posible, evitando productos ricos en azúcares como jugos, gaseosas y comida chatarra”, reflexiona Vargas.
El tipo de alimentación que llevamos no solo es una medida preventiva, sino un compromiso que puede transformar vidas. Al educar y motivar a las personas para que adopten hábitos más saludables, podemos enfrentar de manera efectiva estos desafíos de salud pública.
Mira la programación en Red Uno Play
01:00
03:00
04:00
04:57
06:00
07:00
01:00
03:00
04:00
04:57
06:00
07:00