Un transeúnte fue testigo del momento en que un conductor se negó a transportar a una niña en silla de ruedas.
14/04/2025 7:42
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El pasado viernes 11 de abril, 6:55 a.m., en la esquina de las avenidas Ayacucho y Aroma. Un acto de discriminación se registró y generó indignación, sacudió la rutina matutina de los transeúntes.
Una niña de aproximadamente 8 años, en silla de ruedas y acompañada por una joven, fue víctima de un despreciable acto de exclusión cuando intentaba abordar el micro “J”. Según el testimonio de un ciudadano que presenció y trató de ayudar en la situación, el conductor del micro detuvo brevemente el vehículo, observó la escena y, lejos de brindar asistencia o permitir el abordaje, optó por arrancar sin dar explicación.
“No solo se negó a brindar un servicio público a una menor con discapacidad, sino que lo hizo sin justificación alguna. Fue un acto cruel, discriminatorio e inhumano”, relató el testigo, quien también esperaba el mismo transporte.
Conmovido e indignado por lo sucedido, el denunciante decidió actuar, tomó un trufi para interceptar al mismo micro unas cuadras más adelante. Al enfrentarse al conductor, este simplemente alegó que “no había espacio”, excusa que fue desmentida por el testigo, quien aseguró que el vehículo tenía suficiente espacio para la silla de ruedas.
“Ni siquiera se detuvo dos segundos, era una silla de ruedas para niña (…) Tomé otro trufi para reclamarle, la silla podía entrar doblada”, le dijo el joven que presenció todo. “Le expliqué que no entraba, ahora estoy conduciendo por favor no me distraiga, puede ocasionar un accidente”, fue la respuesta del conductor.
Se espera que las autoridades competentes investiguen este caso.
Estas las imágenes:
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