PUBLICIDAD

“Premio al Esfuerzo e Inteligencia”: El discurso que no fue…

29/01/2025 15:37

Escuchar esta nota

Ser homenajeado siempre es un halago, una alegría para quien lo recibe, en lo familiar y en lo
institucional, y este es el caso del “Premio TUMPA 2024 al Esfuerzo e Inteligencia” otorgado el 23 de
enero de 2025 en una elegante Cena de Gala en el Club Social 24 de Septiembre, en Santa Cruz de la
Sierra, Acto en el que se entregaron veinte galardones en tres categorías: Individual, Institucional y
Empresarial.

A decir de TUMPA RADIO Y TELEVISIÓN -organizador del evento, con 30 años de trayectoria- el
objetivo de instituir tal premiación anual es “reconocer, destacar y premiar a las personas, empresas o
instituciones que, con su aporte intelectual, esfuerzo e inteligencia contribuyen al desarrollo social,
cultural, científico y económico del departamento de Santa Cruz”, buscando “fomentar la innovación,
el pensamiento crítico y el compromiso con el progreso de la región”.

Hermoso el galardón, cabal la música de los violines, deliciosa la cena e inolvidable el encuentro con
quienes fueron distinguidos en los campos del análisis económico y político; en los ámbitos
institucional, cooperativo, periodístico, histórico, académico, industrial, comercial y gastronómico,
además de un homenaje póstumo en memoria de Antonio Rocha Gallardo, que nos dejara el pasado
año.

Esa noche tuve la dicha de compartir mesa con Pedro Rivero Jordán, Director General de “El Deber” –
Diario Mayor, contentos ambos por el galardón, acompañados de nuestras familias, aunque
comentamos que faltaron dos cosas -postre y discurso- lo que motivó esta columna.

Como no estaba estipulado que habláramos, dada la cantidad de homenajeados, nos abstuvimos de
hacerlo, pero, como le anuncié que escribiría una columna en agradecimiento, le pregunté qué mensaje
le hubiera gustado dejar, de haber podido decirlo. Me contestó esto, que me agradó sobremanera: “Que
el país no suelte la mano del buen Dios, y, que los bolivianos nos comprometamos en serio con el
porvenir de Bolivia en un año electoral y unos cruciales resultados”. Profundo y contundente, no por
nada lleva ya cinco libros publicados.

En lo que a mí concierne, ciertamente me hubiera gustado decir muchas cosas: en primer lugar,
creyente como soy, entiendo que tal reconocimiento provenía de Dios, porque escrito está que “toda
buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces”, de ahí que mi primer
agradecimiento hubiera sido para el Supremo Creador; el segundo, para los organizadores, y, en tercer
lugar, habría dedicado el Premio a mi querida familia.

Recibir el Premio “TUMPA 2024 al Esfuerzo e Inteligencia”, tuvo una connotación especial, no solo
como un economista que ha puesto su modesto conocimiento al servicio de la región y el país por cerca
de 40 años ya, sino, también, como un teólogo y Pastor que ve la mano de Dios en todo (tanto así, que
ese día tuve que levantarme de cama para recibir el galardón).

De haber podido discursear, me hubiera gustado destacar al ideólogo del Premio, un queridísimo
amigo, un extraordinario personaje del medio que desde hace más de 30 años nos viene informando,
comunicando, reflexionando y ¡psicoanalizando! (¿algún defecto debía tener, no?), me refiero a Óscar
Soruco López, con quien, cuando hace poco más de 3 años escribíamos, entre cuatro autores, el ya
célebre libro “Modelo de Desarrollo Cruceño: Factores y valores que explican su éxito”, discutimos
cuántas veces si debíamos poner en la tapa su nombre de pila o simplemente TUMPA, como él nos lo
pedía una, otra y otra vez.

Ante tanta insistencia, decidí investigar su significado y, a partir de ahí no pude dejar de llamarlo así en
cuanta presentación del libro realizamos, siendo que los indígenas guaraníes le dieron tal apelativo, que
significa “hombre bueno”, al ayudarlos él en materia de salud y su inserción social; por eso la
connotación especial del Premio, al venir de un hombre de bien que desde joven, en un denodado y
cotidiano esfuerzo -teniendo y sin tener, pudiendo y sin poder- se ocupó de los pobres aborígenes
desarraigados, frente a la indolencia del Estado.

“Esfuerzo” e “inteligencia”, son dos palabras de un alto contenido. Respecto a la primera, Dios nos
manda ser esforzados y valientes, ya que si Él está con nosotros, no debemos temer ni desmayar ante
cualquier situación, por estar bien respaldados. Su Palabra dice también que Él da esfuerzo al cansado y
multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas, por lo que, siempre que alguien dice “no sé de dónde
saca Gary tanta fuerza” respondo que sólo soy el resultado de lo que el Creador hace en mí.
En cuanto a la “inteligencia”, también habla profusamente de ella diciendo que con Dios está la
sabiduría y el poder; que, Suya es la inteligencia y el consejo; que Él esconde la inteligencia cuando no
quiere exaltar a una persona; finalmente, que Dios da o priva de sabiduría, pues de Su designio
proviene el conocimiento y la inteligencia.

¿Se entiende, ahora, lo que entrañó el Premio TUMPA 2024? Yo… ¡agradecido a Dios y bendecido por
ello!

Aviso Editorial de Red Uno - Los artículos que son publicados en nuestra sección Opinión dentro de reduno.com.bo, corresponden únicamente al criterio de sus autores y no son parte de la línea editorial de Red Uno.

Mira la programación en Red Uno Play

PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD

00:00

Problemas y soluciones

01:00

Notivisión

03:00

Hasta que la plata nos separe

04:00

Amor de familia

04:55

Problemas y soluciones

05:55

Identificación de red

PUBLICIDAD